Correo.- Un policía de la comisaría de Santa Elizabeth, en el distrito de San Juan de Lurigancho, intervino a un hombre que no respetaba el aislamiento social obligatorio por el nuevo coronavirus (COVID-19).

Pese a encontrarse en falta por no cumplir con la cuarentena dictada por el Gobierno peruano para frenar la propagación del coronavirus, el irresponsable sujeto identificado como Luis Alberto Castillo Oroya (47) agredió al efectivo policial fracturándole un dedo.

Sin embargo, la fiscal Rosalía Salazar Cárdenas de la 4º Fiscalía Provincial Penal a través de un teléfono decidió dejar en libertad al agresor solo horas después, pese a no haber acudido a ninguna diligencia realizada.

El policía agredido de nombre Miguel Ángel Collantes Guardia señaló que la referida magistrada no acudió en ningún momento a la dependencia policial y que todo fue por WhatsApp. “Ni siquiera tiene la gentileza de llamarme a explicarme por qué motivos está disponiendo esa acción”, sostuvo el policía.