VIII marcha a la Cruz No Mataras por una Sociedad sin Violencia
Este importante evento es promovido por la Pastoral Social de San Juan de Lurigancho de la Diócesis de Chosica se llevará a cabo el domingo 8 de julio.
domingo, 1 de julio de 2007 - 4862 vistas
"¡POR UNA SOCIEDAD SIN VIOLENCIA! CONSTRUYAMOS FAMILIAS CON EL DIÁLOGO Y EL EJEMPLO…" es el lema central de la VIII MARCHA A LA CRUZ NO MATARAS, que se llevará a cabo el domingo 8 de julio.
Este importante evento es promovido por la Pastoral Social de San Juan de Lurigancho de la Diócesis de Chosica y que convoca a la población, a las diferentes organizaciones e instituciones que laboran en nuestro distrito para sumarse a esta acción ciudadana con el objetivo de expresar el amor y defensa a la vida.
En los últimos años por motivo de esta Marcha se pone sobre el tapete un problema social existente y en el 2007 se ha propuesto la reflexión en torno a la problemática de la Violencia Familiar, mal que golpea intensamente a nuestra población, invitando no sólo a la sensibilización sino también al compromiso de todos por luchar contra el maltrato, la agresión, el ataque a la persona y todo signo que atente contra una comunidad familiar saludable, asumiendo una actitud vigilante y difusora en la construcción de Familias sin Violencia.
Señalemos que la Cruz No Matarás es un símbolo del trágico suceso acontecido el 14 de diciembre de 1983, cuando unos artistas junto con agentes pastorales (entre ellos la hermana Juana Sawyer) habían organizado un agasajo solidario para los internos del Penal Miguel Castro Castro y se produjo un motín en el cual algunos presos se apoderaron de los pabellones y los tomaron como rehenes.
En las negociaciones con las autoridades del Ministerio del Interior, nueve presos solicitaron la entrega de una ambulancia y garantías para escaparse, condiciones que fueron aceptadas. Les dieron la ambulancia cuya caseta posterior era de fibra de vidrio, los presos confiados la abordaron, seguros que no iban a disparar contra ellos por los rehenes. La hermana Juana negoció con ellos para ser la única rehén que los acompañaría.
A poca distancia de la prisión, a la altura del Paradero 20 de la avenida Próceres de la Independencia, policías y carros patrulleros estratégicamente colocados esperaron a que pase la camioneta y entonces abrieron fuego contra la ambulancia a la que dejaron como una coladera. Al abrirse las puertas, después de la balacera despiadada, siete de los nueve presos estaban muertos a balazos y la hermana Juana murió pocos minutos después mientras era llevada al hospital.
Ante lo ocurrido multitudinarias marchas se dirigieron hasta el lugar con motivo del rechazo y repudio a la forma tan bárbara en que estas autoridades de turno resolvieron el amotinamiento, asesinando como si la vida no valiera nada, además se colocó en la avenida principal de San Juan de Lurigancho, una cruz, con el Quinto Mandamiento “No Matarás” la que desde entonces, se ha convertido en señal de expresión en favor de la vida y la justicia.
En la actualidad, cada segundo domingo de julio, denominándose “Marcha a la Cruz No Matarás” se congregan, los diferentes actores de nuestra sociedad, alrededor de la Cruz para hacer memoria de lo ocurrido y renovar el compromiso de afirmación y defensa a la vida.
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