A todos de niños nos enseñan el famoso cuento de los tres chanchitos, y sus tres casitas, la de paja, de madera y de ladrillos, cuando llega el lobo solo le bastó soplar para derribar las dos primeras casas pero no pudo con la tercera pues al estar hecha de ladrillos era muy resistente. Esa idea nos suele acompañar en nuestra vida y creemos que por el simple hecho de que nuestra casa haya sido construida con ladrillos y columnas es más que suficiente para que no se caiga. La verdad es que no es así.
Hoy en día podemos ver un comercial el cual nos indica los 3 pasos para tener una casa segura: buenos planos, buenos profesionales y buenos materiales, y a pesar de la campaña publicitaria, algo tardía, seguimos haciendo caso omiso. Pero me pregunto, ¿porque muchas personas no siguen estos tres pasos?, ¿porque siguen contratando a un albañil muchas veces con poca experiencia para construir su casa, sin planos, sin supervisión ingenieril, sin prestarle atención a los materiales que usan?. La respuesta de siempre es que a su entender el costo del proyecto sería muy caro y con ese dinero podrían construir más. Grave error.
Veamos, cuando un Ingeniero Civil al diseñar una vivienda realiza los cálculos necesarios para asegurar la estabilidad de la estructura frente a cargas y fuerzas externas, una vivienda debe ser resistente al peso propio, el de las personas y muebles, pero el principal esfuerzo que debe soportar es el de un sismo, si bien el peso produce un esfuerzo vertical el sismo produce un esfuerzo horizontal, el cual es más severo con las estructuras y si estas no están correctamente diseñadas podría sufrir un colapso.
Los maestros albañiles por más experiencia que tengan no son capaces de realizar un diseño estructural, y lamentablemente reciben la responsabilidad de diseñar las estructuras y construirlos, ellos son muy buenos levantando un muro, construyendo una columna o una viga, pero no saben porque deben llevar cierta cantidad de fierros.
En muchos casos los albañiles construyen sin planos, ellos en su afán de asegurarse sobredimensionan las estructuras, colocan más fierros de lo necesario en vigas y columnas, y muchas veces incluso terminan colocando menos de lo necesario. Una frase común es que ya han construido muchas casas y ninguna se ha caído, eso al parecer es más que suficiente para que confíen en su trabajo y sigan construyendo más y más viviendas ya sin necesidad de planos y diseños previos. A la larga lo barato sale caro, incluso se paga con la propia vida.
Lamentablemente en nuestra capital Lima no se presenta un sismo de intensidad moderada desde el año 1974, fecha en la que aún no existían los asentamientos humanos, invasiones, las casas sobre los cerros, en terrenos considerados malos para la construcción, y aún no se encontraba superpoblada, digo lamentable porque nos hemos confiado en ello y creemos que nunca más va a haber uno, y si viene debe ser como un temblor mas.
En el 2010 Chile la ciudad de Concepción fue azotada por un terremoto de 9 grados, y a pesar de que ellos tienen ya conocimiento y experiencia frente a este fenómeno sufrieron un gran daño, muchas estructuras fallaron y el tsunami terminó por destruir a la ciudad.
En Pisco en el 2007 la destrucción fue peor aún, pero no por el tsunami sino por el mismo terremoto, viviendas de ladrillos y concreto fueron destruidas, ni que decir de las de adobe. Debemos tener en claro que el terremoto como tal no mata, son las casas mal construidas y sin diseño las que terminan cayéndose y causando daños a la vida de los que la habitan. A pesar de saber que pronto seremos afectados por un gran sismo seguimos actuando con total irresponsabilidad y negligencia, sabemos que estamos en una zona altamente sísmica, sin embargo parece no importarnos y ponemos en riesgo nuestra vida y la de nuestra familia.
Para muchas personas incluso albañiles en las construcciones solo trabajan las columnas y las vigas, los muros solo están de relleno es por eso que usan ladrillos huecos conocidos como pandereta para construir su casa, esto es un serio y grave error pues no es así.
Existen dos sistemas utilizados en la construcción, los sistemas aporticados (columnas y vigas usadas en edificios) y los sistemas de albañilería con muros portantes (ladrillos, columnas y vigas), en las viviendas comunes que conocemos usamos el segundo, basados en unidades de ladrillos King Kong quienes absorben todo el esfuerzo tanto vertical y horizontal (peso y sismo), pero entonces ¿cual es la finalidad de las columnas si son los muros los que trabajan? pues justamente la finalidad de las columnas es evitar que estos muros se volteen o se dañen en caso de un sismo. Si no hubiera sismos podría construirse sin necesidad de usar las columnas pues el ladrillo como tal soporta muy bien el peso de la vivienda, pero al presentarse los esfuerzos laterales producidos por los sismos fallan rápidamente por lo que necesitan de refuerzo de confinamiento otorgado por las columnas y vigas.
Es por ello que ante un terremoto de gran magnitud en una casa de varios niveles son los primeros pisos los que soportan todo el peso y el mayor esfuerzo lateral, y si no han sido diseñados adecuadamente suelen fallar rápidamente colapsando la vivienda y quedando inservible, los casos comunes son: columnas muy separadas, columnas y vigas con pocos refuerzos de corte (estribos), muros portantes con ladrillos pandereta (increíble pero cierto), cimientos inadecuados, viviendas sobre suelos no aptos para soportar grandes cargas, y sobre todo estructuras mal construidas (mano de obra sin experiencia).
Terremoto de Pisco, se puede apreciar una vivienda donde fallaron los muros del primer piso, por la excesiva carga sin un adecuado diseño
El uso de ladrillo pandereta debe limitarse solo para levantar muros de tabiquería, divisiones interiores, parapetos y otros que no requieran función estructural. Sin embargo son utilizados indiscriminadamente con la absurda idea de que pesan menos y así la estructura en conjunto no soportaría mucha carga. Estos no ofrecen ninguna resistencia ante un esfuerzo lateral, y son blanco fácil de un sismo, son los primeros muros en fallar y el colapso de la vivienda es inminente.
Colapso total de la estructura debido al uso de muros con ladrillos pandereta en los pisos inferiores. Terremoto de Pisco 2007
Otro serio problema que no se tiene en consideración son los suelos, el terreno sobre el que se levanta una vivienda, cada suelo tiene características distintas, no todos se comportan de igual forma, sin embargo creemos que si en una casa se hicieron cimientos de ciertas dimensiones entonces si se construye una réplica en otro lugar los cimientos deben ser igual. Esto es totalmente falso pues los orígenes de los suelos y sus características son totalmente distintos.
Vivienda de 4 pisos colapsada en el terremoto de Pisco, resultado de la negligencia de construir sin estudios, planos ni supervisión de un Ingeniero Civil
Existe un silencio sísmico en Lima de casi 40 años, solo cuando ocurra un terremoto sabremos que pasará, y si realmente nuestra ciudad esta preparada, lo más probable es que tengamos que pasar factura por todos los errores y negligencias cometidas, y lo lamentable es que sería con nuestras propias vidas. Luego de un terremoto como el que azotó Chile, Haití o Japón, recién allí al ver tanta destrucción y muerte tomaremos conciencia y en el futuro no cometeremos los mismos errores. Pero mientras tanto seguirá reinando la informalidad y despreocupación.